La poesía es un regalo de los dioses y de tu propia percepción...
Claro, que nada sucede de la noche a la mañana, así haya escrito un buen poema de un día para otro, en una tarde en que el sol amansaba los cuervos altivos y de espíritu de bronce.
La poesía no es ninguna casualidad, es en realidad un trabajo de mucha constancia, disciplina ardua, ser muy pulcro en tus elecciones de lo que asimilas día a día y de lo que te abstienes por igual, ya que al final uno es responsable de cómo edifica su propio barco o castillo.
CIERTO
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