DIEGO VICUÑA VILLAR
PRESÉNTAMETU RECIBO
A mi corazón le debes
dos mil quinientos
suspiros
si alguna vez me has
pagado
Preséntame tu recibo.
Cuántos
versos y poemas,
tonaditas
y canciones,
cuántas
de mis emociones
cuántos
amorosos temas.
Cuántos
dolores y penas
que
en mi sentimiento mueves,
ora
largos, ora breves
que
ya turban mis sentidos
y
cuántos tristes gemidos.
a mi corazón le
debes.
Conmigo
estás endeudada
y
esa deuda no perdono
y
aunque no te condiciono,
la
deuda ha de ser saldada.
Quizá
tú no sientas nada
pero
yo me alzo y conspiro
y
hacia ti me vuelvo y giro
para
ya irte diciendo,
que
ahorita me estás debiendo
dos mil quinientos
suspiros.
Cómo
eres mal pagadora
te
harás la olvidadiza
y
aunque yo no tengo prisa
no
me gusta tu demora.
Si
tu desdén no valora
un
bien que te ha sido dado
y
si al serte reclamado
voy
a encontrar tus enojos,
dime,
mirando a mis ojos
si alguna vez me has
pagado.
Si
alguna vez me has pagado
dime
cómo, dónde y cuándo,
dime
si me has ido dando
algún
lugar a tu lado.
Hoy
me ha dicho un abogado
y
un Juez en lo Coactivo,
que
debo hacer efectivo
el
débito que dejaste
y
si algo me pagaste
preséntame tu recibo.
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