lunes, 20 de junio de 2016

EL "AMAROMAR" DE JOSÉ BELTRÁN PEÑA. POR MARÍA ROJO.



 
EL “AMORAMAR” DE JOSÉ BELTRÁN PEÑA
Por María Rojo Villanueva
Muy buenas noches distinguida  concurrencia.
En esta oportunidad se  me  ha  encomendado la  delicada tarea  de  presentar el poemario titulado “Amoramar” (Lima, Ediciones Amantes del País, 2013)de nuestro prestigiado poeta, promotor cultural y amigo,  dilecto José Beltrán Peña de  la cual me  siento muy  honrada.
Como ustedes podrán apreciar, AMORAMAR es un  título muy sugestivo que nos conduce a  los confines de  uno de los fenómenos más importantes para el ser humano: EL AMOR. De él se han ocupado la poesía, la literatura, la música, el  cine, e incluso la filosofía.
Siendo  el amor el  núcleo de  la  vida,  de  las  relaciones humanas,  del  sentir  de  los sentidos,  y  siendo  tantas  cosas, sigue siendo al día de hoy un misterio para muchos, comprender  el amor y  los  sentimientos que  genera su origen y su conducta.
La  ciencia  ha  sido  tardía en  adentrarse a este  fenómeno y  comenzar  a  descubrir sus claves.
Existen  estudios  sobre  el  amor  desde  una  perspectiva cultural,  evolucionista  y neuropsicológica las  cuales intentan  responder  muchas  interrogantes.
Sin  embargo,  los  estudios del  amor en  sus  diferentes enfoques coinciden  en resaltar la evolución  del  amor como un tránsito de  la  fase  de  atracción y  pasión,  a  la  intimidad o el  apego,  luego al compromiso,  haciendo  hincapié en las  diferencias entre  las  personas en  su  modo  de ser y de  enfrentarse  al  amor.
El  amor es  entre todas las emociones la  más humana y la más compleja y, es  la  que más nos cuesta comprender e  interpretar.
Entonces nos  preguntamos ¿Qué  es  realmente el amor?
El psicólogo Robert Stemberg en su  teoría  triangular del  amor  nos habla  de tres  variables que en  perfecto equilibrio componen la  forma  pura  del amor:
Intimidad: sentimiento de cercanía, unión y afecto hacia otra persona y  principalmente la autorrealización.
Pasión: estado de excitación mental y física caracterizado por  vehemencia a  otra  persona. Estado de unión con  el  otro, como expresión de deseos  y necesidades.
Compromiso: Relación  de  compañerismo  sin  que  haya intimidad  ni   pasión.  La decisión de  amar a  otra persona y el  compromiso de  mantener  ese  amor.
En realidad,  nunca  se  da una  combinación  perfecta de las  tres  variables,  el  ciclo amoroso  no  es constante y  hace  que  mientras  el  amor romántico comienza  con  alta dosis  de  pasión y  una  creciente  intimidad,  se  vaya  transformando  en  amor  compañero, donde  baja  la  pasión,  se  mantiene  la  intimidad  y  aumenta  el  compromiso.
El  tono emocional del amor compañero es más maduro que el pasional, las  pasiones extremas se transforman en comunicación, ternura, afecto y satisfacción, las  claves de  una  relación duradera.
Desde  las  corrientes psicoanalíticas,  Erich  Fromnos  habla del   Amor como   un  arte y como  tal, una  acción involuntaria que  se  emprende y  se  aprende,  no  una  pasión  que se  impone contra  la voluntad de  quien  la  vive.  El  amor  es  así, decisión, elección y actitud. El  considera  que  es  un  arte y  que  en  consecuencia requiere  esfuerzo  y conocimiento.
Mantener un amor  consumado puede ser aún más difícil que  llegar  a  él. De  ahí  la importancia de traducir  los componentes del  amor en  acciones.
“Sin expresión” hasta  el  amor  más  grande puede  morir, es decir se produce el  fenómeno del  desamor.
Ahora bien, después de  esta breve  introducción en  torno a la  temática  del  amor,  voy a referirme al tema  central motivo  de  esta  noche cuyo objetivo principal, mediante  el acercamiento a  la  poesía de José  Beltrán Peña, es  demostrar  cómo  el  amor se  constituye en  uno  de  los  pilares  fundamentales  de  su  poemario.
Analizando el título de su obra Amoramar, el mar de José Beltrán Peña, se nos  presenta como un  símbolo  unitario,  en este  caso  entre el yo interior del  poeta y la  realidad trascendente  del ser. El  mar es el punto de unión del mundo real con  el mundo trascendente, punto donde el poeta tendrá que pasar para seguir ascendiendo hacia lo universal absoluto.
A  través de la lectura de los poemas que forman  parte del  presente poemario, se evidencia el  arte  poético como  una  comunicación de vida, una experiencia de amor y comunión.
Así mismo, la idea de  libertad,  amor  y  poesía se  convierte para el poeta en la  constelación que debe iluminar y  presidir  toda la existencia humana y a través de esta existencia, lograr la destrucción de la realidad material y restablecer un  nuevo orden de valores universales surgido de la imaginación creadora.
El amor y la  mujer ocupa un lugar central: la plena libertad erótica se da a la  creencia en el amor único. La mujer abre las puertas de la noche y de la verdad; la unión amorosa  es una de las experiencias más altas del hombre y en ella, el  hombre toca las dos vertientes del ser: la muerte  y  la  vida;  la  noche  y  el  día. Se advierte a través de su poesía cómo la mujer se constituye en el centro principal de  su  poesía y en un  medio de alcanzar la  trascendencia espiritual.
Tanto el amor como la mujer, ente amoroso y erótico, se configuran en la  poética de José Beltrán Peña, como dos elementos fundamentales para alanzar el sentido  trascendente del poema, y a través de  éste, la realidad. Mediante el amor se  llega a  tener conciencia de  la presencia del “otro” y  mediante  esta concepción  de “otredad”, el poeta comunica su interior con  la realidad trascendente (sentido  universal del poeta) .
Desde la  poesía  de  José  Beltrán Peña, el  amor se convierte en la defensa del  hombre contra la muerte, contra la división, contra la rutina de la vida diaria, contra todas las corrupciones y las hipocresías que nos separa los unos de los otros y  de nosotros mismos. Es la libertad del alma frente a todas las fuerzas que tratan de  deshumanizar a la humanidad.
Finalmente, debo felicitar a nuestro gran amigo José Beltrán Peña, por habernos  mostrado y desnudado su gran sensibilidad y, concluiré agradeciéndole por el honor de haberme conferido la oportunidad de haber presentado un  poemario tan especial, leyendo una selección de sus poemas donde se vislumbran los colores del amor, el amor como historia y el amor a lo largo de la vida.

EVA

Eva es ingenua, bella, la existencia,
el suicidio del encanto por sí misma.
Eva es pasión y es brujería, es carisma
en la voz del poeta, luz, presencia.

Eva es maravilla de la creación, esencia
cuerpo, deseo vivo, amor.
Eva es recreación, música, sofisma
con sensualidad, aro bendecido.

Eva es un ciclón, es un tormento,
el sueño lunar del sol, paz, aliento,
alimenta con sangre y alma nuestros cuerpos.
Eva no tiene tiempo, linda chica
que hace más hermoso el universo, pica
y encandila al amor en dos.


HAIKUS

Sube y  baja
La marea  del  amor
Eternidad fin.

***

Sueño de leche
El mar se desbordó
Amores de sal.

***

Besos del alma
Eterno universo
Amor corazón.


INTIMORES

El desamor tocó mi puerta
Mi corazón sufrido le mostró sus heridas
Retirándose entre lágrimas dijo: perdón.

****

La sombra de tu pasión
Ha cambiado un rayo de sol
Tu camino abre tu flor.

****

En tu corazón mi existir
En tus ojos el color del camino
En tu palabra mi salvación.


AMOR  INMORTAL

No sé si  es  un  milagro
O una maldición
Mi  corazón  se  ha  detenido
Y la  sigo  amando.


2 comentarios:

  1. El amor y la mujer ocupa un lugar central: la plena libertad erótica se da a la creencia en el amor único. La mujer abre las puertas de la noche y de la verdad; la unión amorosa es una de las experiencias más altas del hombre y en ella, el hombre toca las dos vertientes del ser: la muerte y la vida; la noche y el día. Se advierte a través de su poesía cómo la mujer se constituye en el centro principal de su poesía y en un medio de alcanzar la trascendencia espiritual.

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