JOSE BELTRÁN PEÑA, POETA A TIEMPO COMPLETO
Por WINSTON ORRILLO.
No creo que pase un tiempo sin que José Beltrán Peña no se halle ensimismado en / con la poesía.
En el Instituto Enrique Porras Barrenechea de la Universidad Nacional Mayor Mayor de San Marcos: Eduardo González Viaña, José Beltrán Peña, Winston Orrillo y Eldi Toro.
Su trabajo de poeta y editor cubre un amplio dominio de la creación, pero no solo de ella, sino, asimismo, de la difusión.
Veamos, por partes.
Lo conozco desde hace una pila de años. Y, siempre, a su lado, con él, la poesía y la edición de revistas, la organización de festivales, congresos, reuniones líricas.
Ahora nos detenemos en AMOROSA-MENTE / Antología personal de poesía (Lima, Gaviota Azul Editores & Sociedad Literaria Amantes del País, 2022), como ya he escrito, un aluvión de lírica amorosa-erótica, además muy bien editada (por él mismo).
No creo que la vida le dé para mucho más que escribir y editar, no solo poemas, sino revistas y para organizar festivales. Todo hecho por él mismo: ¡Debemos preguntarle cómo lo hace!
Quisiéramos -¡Cómo no!- tener la sangre de su lírica y beber de ella, aunque -no es malo reafirmarlo- él, al escribir, enseña permanente.
Pero no sólo se halla la relación lírica con la pareja, sino avanzamos hasta el culto a los progenitores, y a la entraña misma, que es el sagrado suelo en que nacimos, y el propio mundo que, hoy más que nunca debemos defender, pues se halla seriamente amenazado por la inconciencia de los que detentan, ecuménicamente, el poder, cuyos intereses no son sino los de llenarse los bolsillos, aunque -lo sabemos- esto no será por mucho tiempo. Ya el planeta sufre de un calentamiento global que nos está llevando sino hacia la extinción de toda forma de vida en el orbe.
Y, aunque esto no parezca “poético”, defender el globo terráqueo, es una forma más de hacer creación pues no concebimos un mundo sin la criatura humana.
Pues, de todo esto, amén de su intensa lírica amorosa, es una muestra, cabal, de cómo la poesía, la creación literaria, la difusión de los sueños, es una forma más de combatir por la vida, que es combatir por la lírica, por la creación, por la vida misma.
Y estos pensamientos se derivan de la introducción en la multívoca obra de nuestro joven y ejemplar autor.
No quiero dejar de decir que José Beltrán Peña es una “rara avis” en el campo de los artistas, pues, la mayoría de ellos, solo se contornean en su pequeño -y mezquino- entorno.
Beltrán nos enseña verdades poéticas, que él llama, atinadamente, “Evangelio”, y con ello nos hace ingresar a un orbe exquisito de “Haikus” y “Quipos” hasta arribar a “La posada del Ángel”, es decir a nuestro propio interior, en y desde los cuales, la vida misma se eterniza por el poder del arte inmortal.
“Un niño viejo” en medio de esta Zoociedad que se salva por el amor, por la poesía. Sus armas son la belleza, el erotismo, y esa voluntad ínsita de no decaer jamás y por ningún motivo.
La mejor enseñanza que se puede sacar de esta obra integérrima, es la de seguirla, y leerla no como se hojea cualquier texto, sino con la convicción de que estamos ante una creación magna que no solo enseña, sino que permanentemente es un señalamiento de la ruta para la vida, para el amor, para la libertad.
++++++
Dos fotos que se tomaron, en la presentación de mi antología, Amorosa-mente, en la Feria Internacional del Libro de La Perla, en el Callao 2023. Estoy acompañado de la poeta y coaching, Rocío Martínez Bustillos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario