Es evidente que usted mister Pedro Pablo Kuczinski se ha propuesto
destruir al Perú. Apenas termine su mandato (ya lo ha determinado así),
se irá a Estados Unidos para radicar y morir
allí, sin importarle ni medir las consecuencias del daño moral y
político que causaría a millones de peruanos que nunca imaginamos
cometería el error de liberar a Alberto Fujimori Fujimori. Si siendo
candidato a la presidencia hubiera anunciado sus intenciones
subalterna, nadie hubiera votado por usted. Ha esperado mucho tiempo
para tratar de inferirnos una puñalada por la espalda, un sicariato
político sin antecedentes en América Latina y el mundo. Se trata de un
acto de traición política a los electores y partidarios,
que no se explican cómo pudo cambiar tanto en poco tiempo.
Quienes nunca hemos optado por otra nacionalidad (que no tiene nada de
malo), hemos heredado el orgullo, memoria y conducta moral de ser
peruanos consecuentes. Ese hecho nace con el
ejemplo que heredamos de Túpac Amaru, Micaela Bastidas, Fernando Túpac
Amaru, Juan Bautista Túpac Amaru Monxarrás, José Faustino Sánchez
Carrión, Bolognesi, Grau, Cáceres, Vallejo, Arguedas, el general Velasco
Alvarado, Rita Puma, Romualdo y Javier Heraud,
entre otros peruanos ejemplares. El hecho que haya abierto una
innecesaria posibilidad de libertad del súbdito japonés Alberto Kenya
Fujimori Fujimori, ha llegado a un límite francamente inaceptable. Pero
usted insiste y tal parece que habría determinado cometer
el más grave de sus errores políticos. ¿No escucha o no tiene asesores
en materia de Derecho y delitos referidos a Derechos humanos? Sin
embargo, todavía está a tiempo de rectificarse, diga como dice siempre,
“vamos a ver” y ríase a carcajadas para que lo
aplaudan quienes lo entienden.
Eso de afirmar que el preso Fujimori está enfermo y “vamos a ver qué
hacemos”, significa una afrenta a la razón jurídica, un insulto a la
inteligencia ciudadana, un desafío a la historia,
un agravio a la memoria social, una agresión a las víctimas, un oprobio
a la razón, un dicterio a la cultura, una mofa a la legislación
inherente, un innecesario ultraje a los jueces que juzgaron a Fujimori.
Finalmente una grosera invectiva al pueblo peruano.
Usted no ha medido sus palabras y nos hace pensar que tiene la decisión
tomada, pero se equivoca. Ahora solo esperaría que baje la presión
ciudadana para firmar el decreto y Fujimori viaje al día siguiente al
Japón. Nunca es tarde para rectificarse, diga que
no dijo lo que dijo y después lance su risotada cachacienta,
destemplada.
Pero nos ha advertido con meridiana claridad:
“Eso
será noticia en algún momento, pero no podemos seguir siempre en lo
mismo". No ha dicho que
se trata de un reo que tuvo el debido proceso y fue condenado a veinte
cinco años de carcelería. Usted tampoco advirtió que Fujimori Fujimori
es autor mediato de veinticinco asesinatos y dos secuestros, durante su
mandato de 1990 al 2000. Ha omitido aclarar
que se trata de una decisión personal porque simplemente le da la gana.
Eso le ha faltado porque argumentos jurídicos, no tiene.
Durante su discurso en el Foro XVII Foro Iberoamérica, realizado el
Buenos Aires (Argentina), usted mister Kuczynski, se despachó a su
antojo sin que nadie se lo pidiera ni preguntara.
Sin duda, aprovechó para que la prensa internacional lo escuchara, así
contentar al reo Fujimori y de modo especial a Fuerza Popular,
agrupación de imbecerriles que lo tiene amenazado, atemorizado,
asustado, cautivo, prisionero. Le han hecho creer que lo vacarán
si no cede a sus constantes presiones. Además de ser un acto desleal
con el Perú por haberse pronunciado a favor del reo Fujimori sin
expediente alguno, nos ha ofendido y agredido sin que haya habido causa
alguna. Estamos seguros que sus declaraciones no las
haría en Lima y menos en ninguna ciudad del Perú.
En este tema no caben sus desacertadas palabras: “(Alberto) Fujimori
nos hizo entrar a APEC y ahora está en la cárcel. Está enfermo y vamos a
ver, pues, qué hacemos. Eso será noticia
en algún momento”. Pero lo más grave es haber dicho: "Tiene
que haber un cambio,
romper esquemas, buscar nuevas ideas". No es verdad, las sentencias
contra Fujimori están bien fundamentadas y mejor redactadas, nada podría
cambiar el sentido lógico y jurídico de la literalidad. No puede haber
cambios y menos buscar nuevas ideas. ¿No sabe
acaso que Fujimori tuvo el debido proceso? Fue un juicio justo y
público que el pueblo peruano vio a través de la televisión. Romper
esquemas es imposible. Fujimori tiene que cumplir el tiempo de
carcelería impuesta por tribunales peruanos, aunque a usted
no le guste. Salvo que se encuentre a pocos días de dejar este mundo y
después el Perú, se reponga del inmenso daño social, moral y político
que le ha inferido. Todavía está a tiempo de decir que se equivocó por
no haber sido debidamente informado.
Pero lo más sorprendente ha sido su afirmación: “Seguimos con mucho
cuidado la salud de la gente interna de edad, sean el señor Fujimori u
otros. Debemos tener cuidado". Hubiera
sido un acierto político si por ejemplo se refería a la desesperante
situación del general Nicolás di Bari Hermoza, quien en el año 2010 fue
sentenciado a veinticinco años de prisión por su responsabilidad en
delitos de homicidio calificado, secuestro, desaparición
forzada y asociación ilícita para delinquir en el caso de Barrios
Altos, desaparición de nueve campesinos del Santa y del periodista
Yauri. Nicolás di Bari Hermoza está muy enfermo y debería morir en su
casa. Nadie le reprocharía si le concede un indulto
humanitario. ¿Acaso no sabe? ¿Por qué se interesa por Fujimori y no por
los otros enfermos graves y ancianos de las cárceles del Perú? Usted
mister Kuczynski, nos desprecia, ningunea, no escucha ni recibe a
peruanos y peruanas que quieren hablar con usted.
No responde, ese hecho no solo es un acto de falta de respeto, traduce
discriminación étnica y cultural. Así no actúa un demócrata, un
presidente de todos los peruanos.
Sus asesores jurídicos, si es que tiene pero tal parece que no,
deberían hacerle recordar que la Comisión de Gracias Presidenciales está
desactivada, no puede emitir juicio alguno
ni está completa, debido al apresuramiento, manipulación y desacierto
del ministro de justicia Enrique Mendoza Ramírez. En realidad debería
renunciar por dignidad, pero no, se quedará porque se trata de treinta
mil soles mensuales. Usted sabía que el mismo
día en que se refirió al imposible indulto a Fujimori se cumplía un
aniversario de la matanza de Barrios Altos, uno de los hechos por lo que
Fujimori cumple veinticinco años de prisión, no había necesidad de
abrir más heridas ni ofender a deudos que usted
se niega recibirlos.
El caso de Barrios Altos y La Cantuta no son “probables hechos” mister
Kuczynski como ha dicho, se trata de acontecimientos crueles, inhumanos y
graves. Debería usted leer la sentencia
del 7 de abril del 2009. Quienes tenemos una mínima información o hemos
leído el Informe de la Comisión de la Verdad y Conciliación, nos damos
cuenta y se lo decimos con respeto, que no conoce las investigaciones
sobre el proceso de la violencia de orden político
entre los años 1980 y 2000. Usted no estaba en el Perú. El aforismo,
“dime lo que lees y te diré quién eres”, es verdad.
Mister Kuczynski, respetuosamente, sin el menos deseo de desestabilizar
al ministro de justicia (de injusticia) y sus asesores, nos vemos en la
necesidad de señalar que un indulto
humanitario tiene que cumplir los requisitos establecidos. Según la
evaluación realizada y si no tienen en cuenta lo establecido, sería el
más grave abuso político que cometa usted. Si Fujimori Fujimori se
beneficia con el indulto depende de los médicos que
informen respecto a su estado de salud. La Comisión de Gracias
Presidenciales, deberá actuar de acuerdo al procedimiento establecido.
Usted no puede sustituir a una institución jurídica. Todos sabemos que
además el señor Fujimori, su esposa japonesa, cuñados
que viven en Japón, hijos ni parientes han presentado un pedido formal
de indulto. Ese hecho obligaría a Fujimori a someterse a un examen y es
seguro que se sabrá cuánto miente el médico Alejandro Aguinaga y por qué
Luisa María Cuculiza y Martha Chávez se
desgargantan sabiendo que el indulto a Fujimori no procede. Sin
embargo, el pueblo peruano espera diga que se equivocó en todo lo que
dijo en Buenos Aires.
Finalmente le recordamos que el Tribunal Constitucional después del
indulto humanitario a favor de José Enrique Crousillat en el gobierno de
Alan García, al comprobarse que el informe
médico era falso, todo quedó nulo.
Mister Kucynski, tenga la hidalguía de afirmar que se equivocó. Piense,
todavía está a tiempo de rectificarse. No tiene por qué mantener en
vilo a un pueblo que lo eligió para cerrar
sus heridas y tantos traumas históricos. Pase a la historia con
dignidad y no como un felón al Perú mágico, cósmico de todos los siglos.
Lamentablemente empobrecido por el sistema neocolonial y neoliberal que
usted sin duda representa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario