domingo, 24 de noviembre de 2019

ANA ISTARU: POESIA DE ALTO VOLTAJE ERÓTICO Por WINSTON ORRILLO.




ANA ISTARU: POESIA DE ALTO VOLTAJE ERÓTICO
Por WINSTON ORRILLO.


  “El amor hace al hombre de tierra/ y consagra su polvo a la tristeza.//El amor    hace del hombre una joya doliente/ un pesada lágrima o un niño               poderoso.// El amor desnuda al hombre como a un fruto/ y en su olla de poesía lo consume…” 
                                                         Alejandro Romualdo


“Yo soy el granizo/ que entra aullando/ por tu pecho desquiciado…”
                                                        Francisco Bendezú


En efecto, lo que llama, prima facie, la atención, en esta poesía excepcional, es su carga erótica que pasa, de largo, la importante lírica trabajada por mujeres a lo largo y ancho de Nuestra América.

Sin embargo, leída –degustada, no una sino varias veces- la obra que, con singular esfuerzo hemos conseguido (merced a la generosa disposición de Tito Hurtado, gran escritor peruano que reside en Costa Rica) y que es “Poesía escogida” de Ana Istarú (pseudónimo de Ana Soto Marín), completa escritora de esa nacionalidad, pues es no solo lírica, sino dramaturga, actriz, narradora y periodista.

La casualidad –madre de todos los vericuetos- me llevó, ya no recuerdo cómo, al primer poema que de ella acudiera a mi encuentro: creo que fue en una de esas publicaciones aleatorias que se hacen vía internet. Todo fue leerla y acudir al mágico google pues nada sabía de ella, y en éste pude allegarme, amén de a sus elementales datos biográficos, a alguna antología que, de hecho, me sumó a su larga –estoy seguro- fila de incondicionales.

En el libro que me enviara Tito (en “Editorial Costa Rica”, por cierto) figuraba no solo “Estación de fiebre” –que nos llevara al espasmo, sino una variada antología que, por cierto, nos complicó la vida, pues aparecieron composiciones en las cuales el eros era imbricado con una visión existencial (no escribo existencialista) que, como en verbi gratia…Y cito:

  La muerte es un repliegue: Todos seremos despeñados/ en álgido preludio hacia el adiós, la oscuridad, la nube indescifrable./ Llegar a ser no ser/ ni nada de la nada.// Estamos en la muerte chapoteando,/ enrarecidos.// Lleva este beso y ponlo/ como un dardo de amor encarnizado,/ en todo lo que existe.//Mi muerte es un repliegue,/ una estrategia genial/ de la semilla.// Partículas de mí rodando por el cosmos,/ hilando el trance ileso de los astros..// El pulso de la nada es la tibieza./ el átomo dormido que retorna,/ no la amargura.// Agua que fui y carbono dulce/ que el orbe recupera,/ engendran otra faz,/ otra costilla flamante, / locomotoras,/ la fe de los salmones,/ la naranja,/ la rabia irreverente de los hombres,/ los que elevan/ la nave azul del mundo,/ y dan su trozo/ de luz a cada cosa,/ su migaja de paz sobre la tierra.”

Poesía, en fin, como toda la grande, con temas que aparte de las simas y cimas de lo erótico, dan la vuelta al universo y lo aprehenden, con un manejo maestro del idioma –que le ha valido los galardones que merecidamente posee, tanto en prosa como en verso, tanto en dramaturgia como en la crónica cultural (y que no enumero porque no alcanzaría el espacio).

Sus libros se han editado, aparte de su Costa Rica nativa,  dos en España (Editorial Torremozas, 1986, y Colección Visor, 1991) amén de una en francés (La Difference, 1997, Paris)

Dueña de un vocabulario personal e idóneo para una temática que no se cansa de asombrarnos, no nos  queda sino estar a la caza de más obras de Ana Istarú.

Mientras tanto, por el momento, uno más:


Amor 
Posología: Ingiérase cualquier tarde,/ si llueve/ o si hay extraños astros rojos/ en el aire,/ o los hombros arden como estrellas/ o mares.
Precaución: Como cualquier/ milagro de rocío:/ es frágil.//Mantenerse lejos del alcance/ de los que usan corazón de bolsillo/ y dejan guardados los besos/ bajo llave.”

No hay comentarios:

Publicar un comentario