Para una gran mayoría
de ingenieros; una obra es una estructura de fierro, cemento y asfalto o una
combinación de estos o también es una construcción o una edificación de
cualquier tipo. Todo aquello que no responda a estas características, es
cualquier cosa; menos una obra.
En la formación
universitaria, los números, la física en todas sus dimensiones y la matemática
en todas sus manifestaciones, sumergen al estudiante en una nebulosa cuasi
científica y la currícula no ofrece mayor acceso a las letras, o a la formación
artística, en su conjunto.
En el desempeño
profesional, el Ingeniero se convierte en un pensante ser, pleno y cargado de
practicismos, hábil en actividades mecánicas; con competencias efectistas,
técnicas necesarias y manejador de todo lo tangible, puesto bajo su
responsabilidad. Se convierte, en un constructor-ejecutor.
La ingeniería; me
explica el ingeniero Héctor Gallegos, ex decano Nacional del CIP, alrededor de
una taza de café en el Haití miraflorino, a propósito de su libro La
Ingeniería. “Es el arte de usar la naturaleza en
beneficio de la humanidad”; mientras alisa su entrecana cabellera que roza sus
hombros.
La ingeniería es un
arte; entonces un ingeniero es o debería ser, sino un artesano, un artista.
“Sucede que casi siempre se queda en artesano”, me explica, acariciándose su
poblada barba entrecana.
Una estructura
inimaginada e inexplicable como el Universo, es la Gran Obra de Dios.
Recordemos; cuando en el Colegio, el profesor de literatura, decía: Leeremos unas Obras. Allí conocimos a Vallejo, Aristóteles, Mariátegui, Kant, Shakespeare, Arguedas, Sábato, Neruda, Nietzche, el gran Gabo y Mario Vargas Llosa. O en discos de carbón de 33 rpm escuchábamosla Quinta
Sinfonía de Bethoven o las Cuatro estaciones de
Vivaldi. O talvez en algún suplemento cultural llegaba a nuestras manos una
reproducción de Guernica
de Picasso o Van Gogh.
Recordemos; cuando en el Colegio, el profesor de literatura, decía: Leeremos unas Obras. Allí conocimos a Vallejo, Aristóteles, Mariátegui, Kant, Shakespeare, Arguedas, Sábato, Neruda, Nietzche, el gran Gabo y Mario Vargas Llosa. O en discos de carbón de 33 rpm escuchábamos
Según la acepción de
la real Academia de la Lengua ,
Obra deviene del latín opera.
La define como: Cosa producida por un agente. Cualquier producción intelectual. Libro o libros que contienen un trabajo literario completo. Edificio en construcción.
La define como: Cosa producida por un agente. Cualquier producción intelectual. Libro o libros que contienen un trabajo literario completo. Edificio en construcción.
Entonces, una
estructura hecha por las manos y el cerebro del hombre; sea palabras, cinceles,
pinceles o corcheas; es también una obra y, más aún; si esa estructura deviene
de un ingeniero.
El problema se
origina, por la falsa creencia; de que la Ingeniería es incompatible con el arte, en
especial con la literatura y específicamente, con la poesía.
Un ingeniero escritor (uhmm). Un escritor ingeniero (doble uhmm). Un ingeniero poeta (tres veces, uhmm). Un poeta ingeniero (no hay, uhmm. Hay asombro.
Una estructura de
ingeniería tiene mucho de arte: Un edificio, un puente o una red de autopistas,
son arte. La poesía, la música, la escultura, la pintura, tienen también mucho
de ingeniería.
El arte da belleza y
capacidad de asombro, la ingeniería disciplina y constancia.
No será, quela Ingeniería
y el arte, se complementan?.
No será, que
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