POEMAS DEL 79* NATALICIO (“)
Por WINSTON ORRILLO.
(LIMA, 19 DE DICIEMBRE DE 1941- 19 DICIEMBRE 2020).
(“) Son, estos poemas, un himno a la vida, en medio de la pandemia, de la siniestra, Covid-19 y sus nuevas cepas. A ello le oponemos la existencia creadora, el arte que sobrevive y nos incita a seguir adelante. ¡Son 79 años! Son los caminos de la belleza impertérrita, que medra en los museos, en las salas de arte, en la vida misma con su eterno aprendizaje.
Estoy jubilado, luego de 40 años de docencia en la Primera Universidad de América: San Marcos. Y he aquí que he tornado a convertirme en un mero alumno. Pues todos estos poemas no son fruto de la mera y manida “inspiración”, sino son producto del estudio.
De ese estudio que recomendamos a los amables y atentos lectores, para que se proyecte Per omnia saecula saeculorum.
Y que el hombre, la humanidad entera, aprenda por fin a respetar a la naturaleza, pues ella se sabe vengar con los cataclismos, los terremotos, los tsunamis, los deshielos.
Que cese el hombre de intentar hacerse el harakiri, y que el genocida sistema económico concluya, por fin, de poner, por encima de la criatura humana, a los títulos bancarios.
Vade retro, genocidas.
Venga el hombre creador inexpugnable.
Pax vobiscum.
¡Así sea! Y aquí algunos nuevos poemas (o lo que creemos que lo son).
La Calera, Lima, 34, Perú
Desde
Su gran Empíreo
Mi madre
Se desgarra,
Inconfundible.
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Dirige
El albo coro
De serafines
¡Tiembla!
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El cuerpo
Ya no sirve
Pero fluye
El armonio.
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Aclaro
Que yo escribo
Tal vez estos
Poemas
En ese
Ante futuro.
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Una asíntota
Que marca
Tu despiste.
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Y no es
En batiscafo
Que me hundo
En tu procura.
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Y siempre
Es el amor
El que
Me nimba.
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¿Desperdicios? ¡Amo
Los desperdicios
Que son
La propia vida!
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Sílaba a sílaba
Resucito
El silencio.
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Cincelo
Aquel adiós
(Por si no llegas)
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Penumbras
Que hay
Ancladas
En tus poros.
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Y así
Peldaño
Tras peldaño
Hasta el naufragio.
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Ducto
Hacia el arrabal
De tu
Entrepiso.
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Pasmado
En el zumbido
De tu eclipse.
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Y llega
El otro día
¿No es que acaso
Es el mismo?
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¿Qué samsara
Vestiré yo
En tu ausencia?
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En el nombre
Del fuego
Te desbordo.
Insensato
Cantor:
¡Como se debe!
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¡Inapelable
Voz
De la vesania!
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Hipoteco
Mis sueños
Inasibles.
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Serpentean
Muñones
¡ Me devastan!
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Amputado
El jilguero
De tu mantra.
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Iridiscente
Adviene
Tu partida
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Huesudo
El nomeolvides
¡Quién lo sabe!
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Gonfalonero
Soy
De tu quebranto.
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Y fui y
Seré.
Hola, adiós:
Buganvilias andariegas.
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¿Todo
Está infectado
¿Lo estará
Este poema?
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¿Y cuál sabor
Del pan
El de penumbras?
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Trepidante
Canción
De escalofríos.
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Hundido
Yo en tus besos
Exhaustivos
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Deambulo
Por la vida
A mi retorno.
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Recupero
El poema:
¡Aquel no escrito!
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Vuelvo yo
A mi agujero
Deleznable.
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Me arrastraba
En el sueño
A tus confines.
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Mejor
Te hago el amor
Ya bien dormidos.
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Y sales tú
De mí
Sin alharacas.
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No suicida
Potencial
Sino
¡Impotencial!
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Unicornios
¡Emporios
De unicornios!
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Helicóptero
En torno
De tus muslos.
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Se desbandan
Los versos
Sin mortajas.
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Emidosaurio
Soy
¡Si tú lo ordenas!
La Calera, Lima, 34. Perú. 31/12/2020